En este caso de vehículo de empresa defectuoso, nuestro cliente compró un Mercedes S580 2021 usado en un concesionario local de Mercedes con 8741 millas en el odómetro. Poco después de la compra, el consumidor comenzó a tener numerosos problemas, lo que llevó a múltiples visitas de servicio.

En la primera cita de servicio, el consumidor informó una ligera vibración en el volante mientras el automóvil estaba en marcha y se movía lentamente. Después de probar vehículos similares, el concesionario concluyó que se trataba de una característica operativa normal.

Realizaron una actualización del software de asistencia al conductor y ajustaron la presión de los neumáticos a la configuración de fábrica, completando la reparación sin costo para el demandante.

Durante los meses siguientes, este consumidor volvió a realizar visitas de servicio debido a problemas persistentes. Informaron una sensación de temblor al mantener presionado el freno en una parada, junto con problemas de transmisión, incluidos cambios bruscos y ruidos fuertes del freno eléctrico.

A pesar de realizar varias pruebas, el concesionario no encontró fallas y afirmó que el rendimiento del vehículo era consistente con otros de su clase.

Hubo problemas continuos y posteriores, incluido un fuerte ruido metálico en el volante al arrancar el motor y múltiples mensajes de advertencia en el tablero. El concesionario intentó reproducir estos problemas y descubrió que el vehículo funcionaba dentro de los parámetros esperados. Realizaron actualizaciones de software e inspecciones, pero no identificaron problemas importantes.

Después de esto, surgieron problemas más graves, como un ruido crepitante en el volante y casos en los que el vehículo cambiaba inesperadamente a punto muerto, acompañados de fallas en el tablero.

Después de una inspección más exhaustiva, el concesionario determinó que era necesario reemplazar la columna de dirección y también identificó un cuerpo de válvula de transmisión defectuoso. Se completaron estas reparaciones, incluida la reprogramación de la transmisión y la reposición de los niveles de líquido, antes de que el vehículo fuera devuelto al demandante.

El punto de inflexión se produjo cuando, durante este proceso de reparación, el vehículo permaneció en el concesionario durante más de 72 días consecutivos. Esta prolongada visita de reparación superó con creces las expectativas y solidificó aún más el caso de este consumidor en virtud de la ley limón.

Frustrado por los problemas constantes y el tiempo prolongado que el vehículo estuvo fuera de servicio, el consumidor buscó asistencia legal y solicitó la ayuda de Expertos en la Ley Limón, una firma que se especializa en casos de vehículos defectuosos.

Nuestro equipo legal negoció con éxito la recompra del automóvil, y se aseguró de que Mercedes-Benz USA, el fabricante, le proporcionara a este consumidor un reembolso y pagara sus honorarios y costos legales.

Desde 2009, los Expertos en la Ley Limón han recuperado millones de dólares en acuerdos con los principales fabricantes de automóviles. Si enfrenta problemas similares con su vehículo, comunicarse con los Expertos en la Ley Limón puede ayudarlo a explorar sus opciones legales y trabajar para resolver los problemas de su vehículo y obtener la compensación que merece.

Comuníquese con nuestro equipo hoy mismo si tiene alguna pregunta sobre su caso.

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