Con solo 11,449 millas en el odómetro, este cliente informó el primer problema importante en su nuevo Jeep Gladiator 2022: fugas en los amortiguadores delanteros que causaban rebotes excesivos mientras conducía. El concesionario confirmó y reemplazó ambos amortiguadores, asegurando que el vehículo funcionara correctamente.
Más tarde, con 23,197 millas, surgieron problemas adicionales. El controlador del portón trasero requirió reemplazo y la tercera luz de freno estaba apagada. El vehículo también fue objeto de una retirada de seguridad del embrague. Si bien el concesionario ordenó las piezas necesarias para la luz de freno, rápidamente abordaron los demás problemas, garantizando el cumplimiento de las regulaciones de la Junta de Recursos del Aire de California (CARB) para las inspecciones de inflado de neumáticos.
Entre el 13 y el 27 de octubre de ese año, el Gladiator continuó presentando problemas, incluido un exceso de escape blanco en los arranques en frío y falta de aceleración en 3.ª y 4.ª marcha. A pesar de realizar múltiples procedimientos de aprendizaje para la transmisión y el embrague, el concesionario no pudo replicar los problemas de manera consistente, por lo que no se realizaron más reparaciones en ese momento. Sin embargo, todavía había pedidos de piezas para el controlador del portón trasero.
La última visita de servicio se produjo del 22 al 28 de noviembre del mismo año, a 25.650 millas. El propietario informó un tambaleo a velocidades de autopista después de pasar por baches, problemas persistentes con la tercera luz de freno y una percepción de falta de potencia de aceleración a 3000 RPM. El concesionario confirmó que el amortiguador de dirección tenía fugas y lo reemplazó, además de equilibrar los neumáticos. También se reemplazó la tercera luz de freno, resolviendo esa preocupación específica.
A pesar de estos esfuerzos, el vehículo siguió presentando inconsistencias en el rendimiento, lo que generó serias preocupaciones sobre su confiabilidad. Los defectos persistentes y las repetidas visitas de servicio llevaron al propietario a buscar un recurso legal bajo la Ley Limón. Si enfrenta problemas similares con su vehículo, consultar con expertos legales en la ley limón puede ayudarlo a proteger sus derechos y potencialmente asegurar un vehículo de reemplazo o un reembolso.
Después de repetidas visitas de reparación que parecían no llevar a ninguna parte, este conductor de Jeep decidió emprender acciones legales. Los Expertos en la Ley Limón, familiarizados con las leyes de protección al consumidor de California, negociaron con éxito un acuerdo con FCA (Fiat Chrysler Automobiles). Esto resultó en que FCA recomprara el problemático Gladiator y cubriera todos sus honorarios y costos legales.
Esta victoria brindó al propietario el alivio financiero y la tranquilidad necesaria para seguir adelante sin la carga de un vehículo defectuoso.
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